martes, 31 de marzo de 2009

Los ojos que escuchan

Si te arrancan al niño, que llevamos por dentro,
Si te quitan la teta y te cambian de cuento
No te tragues la pena, porque no estamos muertos
Llegaremos a tiempo, llegaremos a tiempo.

Si te anclaran las alas, en el muelle del viento
Yo te espero un segundo en la orilla del tiempo
Llegarás cuando vayas más allá del intento
Llegaremos a tiempo, llegaremos a tiempo

Si te abrazan las paredes desabrocha el corazón
No permitas que te anuden la respiración
No te quedes aguardando a que pinte la ocasión
Que la vida son dos trazos y un borrón.

Tengo miedo que se rompa la esperanza
Que la libertad se quede sin alas
Tengo miedo que haya un día sin mañana
Tengo miedo de que el miedo, te eche un pulso y pueda más
No te rindas no te sientes a esperar.

Si robaran el mapa del país de los sueños
Siempre queda el camino que te late por dentro
Si te caes te levantas, si te arrimas te espero
Llegaremos a tiempo, llegaremos a tiempo.

Mejor lento que parado, desabrocha el corazón
No permitas que te anuden la imaginación
No te quedes aguardando a que pinte la ocasión
Que la vida son dos trazos y un borrón.

Tengo miedo que se rompa la esperanza
Que la libertad se quede sin alas
Tengo miedo que haya un día sin mañana
Tengo miedo de que el miedo te eche un pulso y pueda más
No te rindas no te sientes a esperar.

Sólo pueden contigo, si te acabas rindiendo
Si disparan por fuera y te matan por dentro
Llegarás cuando vayas, más allá del intento
Llegaremos a tiempo, llegaremos a tiempo.

Sólo pueden contigo, si te acabas rindiendo
Si disparan por fuera y te matan por dentro
Llegarás cuando vayas, más allá del intento
Llegaremos a tiempo, llegaremos a tiempo.

Rosana
Llegaremos a tiempo

lunes, 30 de marzo de 2009

Hoy las lágrimas no permiten mirar más que al interior

El autobus subía la serpenteante carretera, camino de las nubes, buscando una tierra cubierta de blanco; éramos locos tras la alegría, nos habíamos propuesto pasar un día de sol y nieve entre risas, comida fría, tabaco, poco dinero y pastillas, siempre las presentes pastillas para acallar las voces que se cuelan dentro y que hacen, de vez en cuando, que sufrais por no poder controlarlas, gritando y mirando sin mirar, golpeando sin saber donde se da y huyendo de un infierno que se llama psicosis, esquizofrenia... y otras cosas a las que el hombre ha decidido dar el nombre conjunto de locura. Ni nuestros consejos, ni aún el sofocante calor del día hizo que dentro del autobús desaparecieran gorros, guantes, plumones y demás protectores contra el esperado frío.
Mirabas y decias... "Ay que vé, ay que vé¡¡¡". Movías la cabeza como siempre, pausadamente y balanceando esa desesperación de hartura que te acompañaba desde el amanecer, reías, tus grande ojos verdes miraban y no veían la realidad, no percibían lo que había frente a ellos, pero sabían intuir que era alegría lo que el momento daba y hacían llegar la orden al cerebro de que se debía sonreir, pasara lo que pasara.
Estuviste "sembrao" durante todo el día, tus gracias, las expresiones de siempre pero de golpe y en conjunto, todas en la misma mañana, dadas a quienes te invitábamos a café, a té, a quienes no podíamos hacer nada ante ese ímpetu que te hacía zamparte tres bocadillos en menos tiempo que uno solo... tú reías, eras feliz, querías que nos fuésemos !ya¡, siempre tenías prisa por ir a ningun lado.
Te sentabas a mi lado y me pedías una sonrisa, que no estuviera tan serio y hablara así, que estábamos en el campo y en la libertad, que fuera alegre y te mirara así, con alegría, necesitabas alegría, querías ser alegre.
Esta mañana me han dicho que estas muerto y aún quiero pensar que es mentira, que no es verdad porque aun escucho tu risa, tengo grabadas a fuego tus imágenes, miramos las fotos del día último en que estuviste junto a nosotros y no hace ni 48 horas.
Te bebiste la vida a chorros, de golpe, entre locura y droga, huyendo del miedo a escuchar voces y ver imágenes de muertos con cabezas cortadas, escapando de la misera de verte solo cada día más, entre gentes que te cuidaban, te respetaban e intentaban rehabilitarte, siempre rehabilitarte, sin dudar ni dejar creer por un segundo en LA REHABILITACIÓN.
Te has muerto y de nada sirve lo que hicimos, ni ejercicios para el área neurocognitiva, ni juegos, ni risas, ni música, ni psicoballet, jardinería, o participar en la revista, o disfrazarte en el carnaval, o estar en la moraga de la noche de San Juan... la próxima barbacoa tu no vas a estar.
Nuestro trabajo no ha sido nada, hoy el sentimiento de frustración no nos permite hablar más de salud mental, no quiero tener trato con nadie que tenga que ver con "eso... LA SALUD MENTAL", hoy no, y es porque te has muerto tu y se me ha muerto un poquito de la esperanza que llevo cada mañana a mi trabajo; esta noche tendré que rebuscar entre la almohada más esperanza para ir mañana recompuesto y poder trabajar con quienes, como tu, estan locos.
Te ha fallado el sistema amigo, ese sistema que no ha sabido trabajar tus dos patologías, que no supo dar respuesta a la politoxicomanía y a tu problema mental, eras dual y no sabemos trabajar con duales, no nos prepararon para ello y no hay sitio para vosotros, cada día falta más sitio para muchos en esta sanidad que falla.
Dicen, y no me creo, que te has muerto de una sobredosis, yo se que es mentira, a ti se te ha reventado el corazón de querer, de añorar a tu padre, a tu madre, a la libertad, a la risa, a ser niño y estar sano, a tus tiempos donde eras alegre y feliz, aquel tiempo donde decidiste ser niño para siempre porque ser adulto no compensaba. Te has movido por mundos de miseria, de dolor y tristeza, por sitios de los cuales no se sale bien si vas una noche, y tu salias; saltaste por un balcón para salvar la vida mientras alguien te acuchillaba, viviste a prisa comiendo todo como si se fuera a derretir en tus manos, te metiste lo que te caia cerca para no escuchar la miseria de las voces que te hablaban de doce apóstoles con cabezas cortadas y te ha matado la droga que te pasó cualquier cabrón que estará durmiendo su casa, tranquilamente, con algo más de euros en el bolsillo y un cliente menos.
Y tu te has muerto para siempre, para no volver y ser cenizas en un cementerio donde colocan a los muertos por si resucitan el día de mañana, sin saber que tu resucitaste cada vez que tuviste una crisis, un delirio o una huida de algun sitio peligroso.
Tenias gracia puñetero¡¡¡ y eso te salvaba de todo, menos hoy que no te salvó de la muerte.
Un día entero sin querer pensar en tí, en los que son como tu, en esos para los que también trabajo y por los que bajo cada mañana al lado del mar, a reir, a mirar, a ser normal entre vuestra normalidad, a llenar los tiempos muertos que deja vuestra dolencia... y ahora puedo hablar, necesito contar a esta nada cibernética que te has ido para siempre, que podremos mirar tus fotos y llorar, de impotencia, porque no podemos hacer otra cosa, como siempre; somos un trocito más de esa cadena que te ha fallado y se llama sistema, otro fallo más y nos escondemos en que "fué un ejercicio de tu libertad", será, sí será asi, pero eso no hace que duela menos.
Ahora, al menos, se que te has muerto habiendo descubierto que la nieve es fría, que no lo sabías, de un frío más grande que la coca.




domingo, 29 de marzo de 2009






El día trae miradas de barroco que revienta bajo mi ventana, nunca me gustó, ni comparto, el uso actual de la iconografía de Semana Santa en la pedagogía de una Iglesia que se va resintiendo con el paso del tiempo pero no deja de emocionarme, como esta misma noche, la voz ronca de un hombre cantando una saeta, bajo mi ventana, al paso de la Piedad, como se la conoce en el barrio. Vivo frente al portón de salida de la hermandad de la Piedad, que procesiona el viernes santo, una cofradía no muy antigua pero con tradición y mucha devoción en el corazón del Molinillo, mi barrio. Dias de sol y noche de frío acompañan los traslados de tronos, sonido de cornetas, hombres de trono y bandas de música repletas de vestimentas doradas, sombreros con plumas blancas movidas por el aire, incienso que impregna la calle de empalagosa emoción barroca. Todo llena la calle de una estampa que se repite cada año, que vuelve a emocionar a unos y a llamar la atención de visitantes que no dejan de venir, por algo será.
No comparto muchos o casi ninguno de los principios que mueven a estas gentes a participar en las cofradías, a pasarse el año entero ensayando marchas procesionales, pintando dorados, limpiando platas, cuidando mantos bordados, adecentando tronos, haciendo rifas y loterías que doten a la cofradía del dinero necesario para salir a la calle un dia al año... pero nada de eso impide que se me remueva algo al paso de cualquiera de estas maravillas barrocas bajo mi balcón, que una saeta y la voz ronca de quien canta me ponga la piel de gallina, que me emocione tanta luz, tanto brillo, tanto silencio y tanto desorden ordenado, nunca entenderé el porqué y renuncié hace mucho tiempo a intentar enterderlo.
La Piedad salió esta noche, recorriendo las mismas calles que lo hizo la Sangre, que procesionó en la mañana, esas calles repletas de gentes que piden cosas a imágenes de barro y madera, de hombres y mujeres que se visten de domingo y se traen a los niños para que vean como se mece en el aire un trono, como suena una corneta o marca el paso un tambor.
Y no renuncio a lo que veo, ni ha sentir lo que siento porque vivo aquí, soy de esta tierra de este lugar, me siento entero de donde estoy y vivo y pienso como el lugar donde me desarrollo.
Adoro la música y a quienes la realizan, me regocijo con el honor de poder apreciar los dones de aquellos que fueron regalados por los dioses y su canto. Esta mañana, mientras pasaba la Sangre, tambien bajo mi ventana, recordé el Canto della Terra, en la voz de Andrea Bocelli, personalmente le prefiero cantando el Nessum Dorma, la imponente aria de Turandot, o Bellissime Stelle; me gusta más la versión del Canto della Terra que hace Sarah Brigtman y Alessandro Safina, cuya voz me emociona; decía que, esta mañana, pense en una canción así al paso de un Cristo tallado en madera, representando un crucificado muerto en la cruz y hombres, mujeres y niños, vestidos de domingo le miran, en silencio, dejan que su sencillez de recreación de la muerte, de la simplicidad, de lo sencillo, lo humilde, lo simple y honradamente perfecto de paso a la grandiosidad de muchos admirando la cualidad de uno, como Bocelli en este video, en medio de un gran número de gentes que le admiran y se emocionan mientras da el don que posee, la música. Un regalo para la mirada que un dia de domingo, repleto de sol, de lilas y glicinias abiertas en estos cortos días de primavera que son antesala del verano, suben su perfume envuelto entre inciensos hasta la ventana de un hombre solo que mira, solo mira y, de paso, admira.



sábado, 28 de marzo de 2009

Una mirada lila y romántica


El hombre camina en el jardín romántico de la Concepción, una maravilla cerca de casa que celebra su jornada de puertas abiertas; esto permite poder ver la glicinias abiertas en el cenador que los Loring tenían al lado de la casona, allí se encuentran los muebles recien restaurados en una muestra que aumenta el goce de visitar el jardín botánico que, año tras año y por el paso de cada una de las manos que fueron dueñas del mismo, aumentó su extensión y se convirtió de jardín romántico en jardín botánico.
El estanque de nenúfares acoge la entrada junto a los merenderos y cafetería, un hermoso lugar donde descansar de la caminata y reponer fuerzas ante lo que se avecina como una aventura entre sonidos de cascadas, pájaros que cantan y naturaleza controlada en ebullición primaveral; unos días hermosos que el sol nos regala y permite sacar a la luz toda la belleza de las flores en sus innumerables colores. Cada estanque, cada escalón, el museo Loring, los mosaicos, la avenida de las palmeras, la ruta por los miradores donde está el emblemático que es imagen del jardín, la casona, las cascadas y el cenador, todo en este lugar es maravilloso, serana el alma y llena los ojos de vida.

El hombre solo se pasea por este lugar con sombrero de paja y bastón de madera, mirando a los niños jugar y correr en un respeto a la naturaleza casi místico, las parejas avanzan buscando su lugar donde dejar que un rayo de sol atraviese lo frondoso del arbol de la miel, la muchacha del cántaro abre una cascada de agua que llena los estanques donde habitan las plantas acuáticas.
La mirada se ablanda y piensa en el tiempo maduro que vive, la soledad aceptada y el corazón posado y pausado en el devenir de las cosas, las vivencias con gentes que le quieren, acompañan y rien los tiempos dulces que acompañan la vida del hombre y su entorno. Algunos vienen y otros van voluntariamente a un destierro eterno tras conocer al hombre y no querer estar a su lado. Las mentiras pretenden dañar el cristal tallado de una existencia viajada y curtida en sentimientos explotados al máximo.
Las glicinias tienen el color lila que saca de lo hondo, del poso ce las verdes culebras de Martín Gaite, de los dolores ciegos y ajenos, de la miseria de quien culpa buscando culpable para su propia culpa... al corazón grande que mira y huele la excelencia que la primavera regala cada año. Las glicinias solo permanecerán abiertas quince días, es un regalo que hay que aprovechar, como la vida.


D´Callaos

Se fué la luz
y a tientas yo buscaba una nueva forma de entender
mejor no digas nada
Se fué la luz
llovió del cielo, aguas que llenan este pozo que hay sin ti
Se fué la luz, se fué contigo

Volaré, y en los desiertos del alma
necesito tanto, tanto de lo que perdí
volaré más allá de este sentido,
se fué la luz, se fué contigo

Y volverá como un recuerdo dibujado en un papel
todas las cosas que no te pude decir,
como contarte, que sigo aqui...Que siento frio





sábado, 21 de marzo de 2009

La mirada de paz

Las personas libro de Málaga se unen a las celebraciones de la marcha mundial por la paz, narran textos de paz en un mundo en continua guerra, paran minutos de unas interminables horas para poner voz a las letras de otros hombres que serán camino de paz en la escucha serena de otros tantos. La marcha mundial por la paz se inicia en Octubre de 2009 y pasará por Málaga, como por otros muchos lugares del mundo, con esta adhesión se nos invita a una lucha continua por la consecución de la utopía que puede dejar de serlo, LA PAZ.
Estais invitados a celebrar la paz, a buscarla y a difundir el mensaje, es un ruego que te hago con toda el alma.






miércoles, 18 de marzo de 2009

Olores y miradas


Se llenan los ojos de verde en la primavera que se adelanta por los montes de Málaga; pinos, tomillo, romero, mil colores en flores visitadas por mariposas limoneras y alguna que otra amarilla y roja, prima hermana de la que, hace tiempo, se posó en la espalda del hombre solo en pleno vuelo cogida y permanecerá ahí para siempre. La naturaleza revienta en alegría y se oyen caer las aguas en la cueva encontrada camino al Lagar de Torrijos, fresco y amable camino en sana compañia, hablando de amores, soledades, alegrías y desencuentros, la vida a flor de piel entre todo un renacer de nueva etapa y risas de niños que a lo lejos terminan de devorar el arroz caldoso que inunda de olores el camino.

Málaga tiene muchas cosas y la principal es la luz que recordó Picasso para siempre, ese color que da el cielo e impregna la vida de una ciudad que palpita allá abajo, en la hermosa bahía que se divisa desde estos montes; encontramos la última venta del camino y allí regamos el mediodía con migas, buen vino y el plato típico de los montes, buen lomo de orza, chorizo y morcilla fritos, un par de huevos que acompañan y patatas, un homenaje al colesterol que hemos de abandonar bajando al lagar, acompañados por el aletear de inquietas mariposas que, según cuentan, nos anuncian la pasarnos y tocarnos la buena fortuna que depara el destino para los caminantes.
Un día pleno de hermosura donde el hombre solo descubre el olfato, poco a poco va recuperando la normalidad tras una dura intervención que devuelve el ser a este hombre que no respiraba por la nariz y había perdido la capacidad de oler, solo recordaba los olores en la memoria y con ellos construía un mundo de vivencias tenidas y de amores a lo tenido en el recuerdo.
La bajada a la ciudad plantea el disfrute de un helado argentino magnífico, manjar exquisito al que invito desde aquí a Fabi, quiero su diagnóstico como buena entendida la supongo de las maravillas italianas, nunca olvidare las especialidades del Tartufo, justo en la esquina de Piazza Navona, la lado de una casa de la que se dice era lupanar eclesiástico... malas lenguas que tiene la historia. Espero la visita de la amiga romana para que pruebe un buen "pajarete", el vino malagueño mezcla de dulce y seco que quita el sentido y poder visitar esta heladería argentina de la que hablo, para pelear entre helados y gustos, sabias disputas gastronómicas que espero.
Los días pasan en rehabilitación, cariños de amigos y amigos llenos de cariño que me colman el alma y reactivan mi cuerpo, dispuesto a largos paseos al borde del mar, entre esas recuperadas arenas de la malagueta, camino adelante hasta llegar al final del Palo, donde el Tintero rifa los platos de pescaito frito y las gentes miran el azul del cielo y el verde del mar que anuncia las frias aguas de Marzo, entre olores a flores que anticipan la Semana Santa, esa que se anuncia entre visitas de Jaén y risas de Hugo, caminatas largas entre dulzura y mimos que el hombre solo añora y anhela.
Se aproxima la primavera y viene cargada de amores nuevos en los amigos del hombre solo, conciertos hermosos de música latina y la voz espléndida de Soledad Giménez, la que hace que salte alguna lágrima recordando a Presuntos Implicados y el calvete de oro que tocaba el bajo, recuerdos de otros tiempos donde la compañía era amada y las risas compartidas.
Días de teatro, jazz, pasión y lectura, entre letras italianas de Alessandro Baricco y Marcel Proust buscando el tiempo perdido; días en que el hombre solo se mira y reconoce en lo que es y quiere ser, recuperado ya de su vergüenza en caer en errores de siempre, de ser y darse a gentes que no son ni respetan, sabedor de que hace tiempo tomó la decisión de no cambiar y seguir con el alma limpia, entregarla y que cada cual haga lo que desee con el trozo que le correspondió, todo se muda y todo retorna, cada uno da lo que recibe y recibe lo que da, así canta Soledad Giménez versionando a un hombre que admira en su nuevo "Dos gardenias". Estoy con ella, algunos hablan de karma, otros cuentan en sus historias de contadores que existe un boomerang que es la vida, es lo cierto.
Continúa el hombre recuperando la normalidad, retorna a su mundo hospitalario y al intento de lucha por el imposible, mantener lo poco que queda de sano en mentes enfermas y animarlo a crecer. Invitación a charlas entre universitarios y exponer la experiencia jugando al teatro, enseñando a los nuevos a usar la palabra como tela de terciopelo que arrope la desesperanza del perdido entre el dolor. Las risas jovenes me recolocan en la realidad, es la risa la que salvara el mundo, no hay duda.
La casa del hombre solo huele a naranja y canela, esencias unidas en el quemador que abre las estancias donde se guarda la tranquilidad de un hombre que disfruta del tiempo pasando entre letras, musicas medievales y amigos que cuentan historias de amor.
Hummmm... !como huele la felicidad de bien¡¡¡


CONCHA BUIKA


MIÉNTEME BIEN


Si me mientes susurrando a fuego lento
Justo aquí bien pegadita a mi boca
No sabré si golpearte con mis pechos
O si dejarme arrastrar noche abajo de nuevo
hacia otra madrugada bohemia,

Reconozco que me enloquecen tus carnes
Reconoce que te enamoran las mías,
Así que si me mientes casi dentro de mi boca
Te regalo el resto de mis días,

Y es que hay mentiras que sientan tan bien
Que parecen verdades ocultas
Con secretos que endulzan la hiel
De las noches más tremendas y más oscuras

Así que si me mientes
Miénteme bien.
Porque hoy quiero engañarme de nuevo,

Ya no reino en esas noches orgullosas
En las que acabo amaneciendo triste y sola.

martes, 10 de marzo de 2009

La mirada curiosa

Encuentra la mirada en estos días de forzada permanencia casera y hemorragias postquirúgicas sin importancia pero molestas, entre palabras del siempre admirado Ray Loriga y músicas pop que llenan de vida los minutos seguidos de paciente búsqueda azul celeste, tras el cristal, y aparición de brotes en los jacintos, el rosal rojo y el otro chino de color amarillo, las calas que regalaron en pago a servicios de cariño prestados y que superan el nulo esfuerzo que supusieron, todo lo que crece y renace en esta primavera donde los amigos destapan amores que curan y, con miedo en los ojos aderezado de voz temblorosa, hablan de fines cuando apenas comienzan.
El hombre piensa que, sobresabido, todo lo que nace ha de morir, mejor esperar que llegue solo y no anunciarlo, mientras tanto vivirlo plenamente.
Se regocija, desde el salón acomodado y cada vez más íntimo, en las palabras de alegría que apenas salen de las bocas enamoradas que le visitan, con ramos de rosas blancas en las manos y tes aromáticos de cereza japonesa para pasar mejor el tiempo entre páginas que consuelan.
El hombre pasa el tiempo en conciertos, teatros, paseos, invitado a dar conferencias y gustoso de ser amigo querido en el que se piensa para enseñar a otros como disfrutar del trabajo estimado y vocacional, contando cuentos que encantan y haciendo bromas del dolor para curar.
Encuentra la mirada, decía, curiosidades de gentes que desconoce y se atrevieron a fundir creaciones originales, alguien que une la música nueva, esa que llega y gusta al hombre solo, con una obra maestra que paso sin mucha gloria y apenas pena de Ray Loriga, homenaje a la subcultura kogal en voz de Las Escarlatinas y sus "Vírgenes Shibuyas" junto a la otra mirada curiosa y nueva, atrevida y valiente en "Teresa, el cuerpo de Cristo".



ESE GENERAL
Rafael Alberti


-Aquí está el general.
¿Qué quiere el general?
-Una espada desea el general.
-Ya no existen espadas, general.


¿Qué quiere el general?
-Un caballo desea el general.
-Ya no existen caballos, general.


¿Qué quiere el general?
-Otra batalla quiere el general.
-Ya no existen batallas, general.


¿Qué quiere el general?
-Una amante desea el general.
-Ya no existen amantes, general.


¿Qué quiere el general?
-Un gran tonel de vino desea el general.
-Ya no hay tonel ni vino, general.


¿Qué quiere el general?
-Un buen trozo de carne desea el general.
-Ya no existen ganados, general.


¿Qué quiere el general?
-Comer yerbas desea el general.
-Ya no existen los pastos, general.


¿Qué quiere el general?
-Beber agua desea el general.
-Ya no existe más agua, general.


¿Qué quiere el general?
-Dormir en una cama desea el general.
-Ya no hay cama ni sueño, general.


¿Qué quiere el general?
-Perderse por la tierra desea el general.
-Ya no existe la tierra, general.


¿Qué quiere el general?
-Morirse como un perro desea el general.
-Ya no existen los perros, general.


¿Qué quiere el general?
¿Qué quiere el general?
Parece que está mudo el general.
Parece que no existe el general.
Parece que se ha muerto el general,
que ya, ni como un perro, se ha muerto el general,
que el mundo destruido, ya sin el general.
Va a empezar nuevamente, sin ese general.



domingo, 8 de marzo de 2009

A un recuerdo y un adios eterno



Tampoco estaba ya dispuesto a hacerse ilusiones sobre el futuro. Sabía, pues no le faltaba experiencia, que las cosas más apetecidas se cogen a veces de la manera más torpe, pero con manos más ágiles.

"Ya solo habla de amor"
Ray Loriga

Nacimiento del Guadalmedina


Como un río que explota en su nacer, en este año de vida y plenitud, de esperanza y renovación, la vida sale a borbotones y las miradas se amplian, el ojo revivido, recuperados olores, sabores, nuevos aires que entran en el cuerpo más viejo cada día y que dan luces azules al horizonte.